sábado, 2 de junio de 2012

¿Me conoces?

Si pudieses decir que me conoces todo sería más fácil, si de verdad lo hicieras, porque de idealizaciones siempre se ha hablado, surrealista es tu imagen de mi imagen, perfecto ni para ti ni para mi.Si te dijera la verdad de toda la verdad, pensarías que miento, que dicha declaración no es más que otra palabra, de ese conjunto, de esa tal verbocidad.Si hablaran los dioses, qué dirían de ti y de mi aquellas fuerzas plasmadas en los grandes templos? dirían que no hemos de ser aptas para entrar en su magnificencia? dirían que somos sus pequeños juguetes no libres del destino? que dirían, dime, qué dirían aquellos dioses. Dime también que dice tu padre, tu madre, tu hermana, dime que dicen esos hombres de corazones rasgados, esos que no pueden ver más allá de su moral, de su amoralidad, porque quién no ha de entender, vuestro corazón? sólo aquellos que nunca han de conocer lo que se llama eternidad. Eternidad tú y yo,y como dejar de pensar en términos sobre valorados, melancólicos e inherentemente cursis? Es que este amor furtivo no lo permite, te propongo un sueño, te propongo que soñemos juntas, y capuletos seremos siempre. Volemos tal como lo hizo Huidobro, dejemos aquellos que no saben volar como Oliverio Girondo, seamos uno, uno dentro de dos, dos dentro de cero. porque cero es un sueño, un sueño de nada, del mismo nihilismo, pero no del nietzscheano, sino del mío y del tuyo.

Cero como el primer beso, el círculo del cero, el círculo de infinito, y han de saber nuestros predecesores que de capuletos soñadores provienen ellos, y que ni los dioses han de separar lo que la imaginación pudo.