No sé si te quiero conmigo, no sé si quiero ser tu amiga, no sé si eres un capricho.. Realmente no sé que quiero contigo y/o de ti, quizás solo me gusta conversar contigo… (Lamento si no soy lo más delicada para decir las cosas pero, creo que te has dado cuenta que no soy muy amorosa -a menos que esté pasada de copas XD-).
Lamento de igual modo haberte ocasionado problemas con tu pololo, aunque sigo sin entender el por qué.. Un llamado es sólo eso, una charla, un momento, una conversación. Estás pololeando, que paja mental, y yo también (no creas que no me importa).
En fin, creo que no entiendes nada, y la verdad ni yo, porque estoy divagando entre ideas aún más difusas de lo usual en mi. Tal vez no entiendes cual es el propósito de semejante volá y estupidez de madrugada de Febrero..
Y en definitiva lo que te quería decir es que me gustas, sí! Y sólo eso lo cual es extraño porque siento que no te conozco, pero a la vez que eres una extraña MUY conocida y la verdad es que te quiero, no como la luna al sol ni cursimente te bajaría una estrella, pero te quiero bien. No digo que te ame, porque de hecho creo que el amor está sobrevalorado…
Se llama falsamente amor al capricho de unos días, a una relación ligera, a un sentimiento que no acompaña el precio, a una costumbre fría, a una fantasía novelesca, a un gusto al que sigue un rápido disgusto; en una palabra se da ese nombre a una multitud de quimeras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario